Historia

  Saint Vith desde el año 2000 trabaja incansablemente con el objetivo de proveer transformadores de alta calidad a hobbistas y entusiastas de la electrónica valvular, entre sus productos se destacan transformadores de fuente, chokes de filtrado, transformadores de salida para alta fidelidad, guitarra, entrada en unidades de reverb, etc.  Dentro de las características más destacas se puede mencionar el bobinado manual en capas ordenadas sin superposición de espiras ni entrecruzamiento de capas superiores con inferiores, seccionamiento para ampliar respuesta, uso de materiales de primera calidad y laminaciones especiales de grano orientado M5 en el caso de transformadores de alta fidelidad o bajo.  Todo esto asegura máximas prestaciones siendo estas reproducibles entre diferentes unidades de un mismo modelo.

  Tomando la calidad como meta fundamental se lleva adelante un trabajo de desarrollo y constante mejora de sus productos. 

  En mayo del año 2006 se introduce en el mercado de amplificadores de audio de alta fidelidad con el modelo SV-35 San Marcos y unos pocos meses después su primer amplificador de guitarra SVG-55 San Gregorio.  El San Marcos sale al ruedo ofreciendo prestaciones pocas veces vistas en amplificadores ultralineales, su sonido es claro, limpio y relajado, pudiendo escuchar música durante horas sin sentir nunca la fatiga propia de equipos pobres en diseño, el mejor término para definir su sonido es Realista, con grabaciones de calidad realmente uno pierde la noción de estar escuchando un disco o música en vivo.  

  El San Gregorio se constituye como amplificador de guitarra monocanal de usos múltiples por su excelente tono y capacidad de adaptarse a cualquier efecto que se desee utilizar.  Sus 50 W permiten tocar a volumenes muy altos sin que el sonido pierda su tono característico y fiel a la ejecución del instrumento, esta propiedad lo hace ideal para el uso complementario de pedales y efectos, respetando los deseos del músico. 

  A mediados del año 2007 se lanza el amplificador de bajo SVB-100 San Patricio de 100 Wrms de potencia, y a finales del mismo año el segundo amplificador de guitarra, SVG-10 San Pablo.  El San Patricio brinda un sonido extremadamente potente y contundente sin caer en los típicos excesos de los amplificadores valvulares de bajo que tienden a saturar perdiendo tono y expresividad.  Su respuesta pareja en a toda frecuencia permite sentir toda la fuerza de un bajo profundo como así también el detalle fino en los agudos y los armónicos más altos. 

  El San Pablo brinda un sonido limpio de excepcional calidad gracias a la salida en Pura Clase A en conexión Single Ended, y una riqueza tonal que ninguna configuración Push Pull puede brindar.  Este equipo tiene un canal limpio equalizado y a diferencia del San Gregorio otro canal en el que se anula el control de tono dandole un toque extra de ganancia para que sus válvulas de potencia saturen brindando el mejor sonido que el Rock pueda pedir.  La válvula de salida 6V6 satura a bajo volumen, evitando tener que tocar muy alto para conseguir ese efecto.  Este equipo sale con 2 zócalos para válvulas de potencia pudiendo operar con 1 o 2, la potencia final es de 4,5 W y 9 W. 

Filosofía de trabajo

   Algo que hay que destacar es que Saint Vith no es una alternativa de bajo costo a equipos y transformadores importados que por la situación del país se tornaron inaxesibles.  Saint Vith no copia, no imita, ni hace negocios con trabajo ajeno.  Saint Vith desarrolla y busca ampliar los límites de lo existente, brindando productos propios y originales sin nunca olvidar la meta de calidad absoluta.